Últimamente andamos Ninoska y yo enfrascados en la tarea de
revolver-ordenar las casas de nuestros padres, en un armario dentro de una
desvencijada caja de cartón encontramos una pequeña colección de tarjetas
postales que datan de los años 40-50, tiempos aquellos en los que no existían los
ordenadores, las redes sociales, el Whatsapp, ni los teléfonos móviles y en los
que incluso escaseaban los fijos en los domicilios, por eso nuestros padres y
abuelos recurrirán a la hoy vieja y olvidada costumbre de escribir para recordar y declarar su amor
La vieja costumbre de escribir, ¡Ah qué bonito era!
ResponderEliminarRecobrando la vieja costumbre de visitar al Gachupín más gachupín de todos los gachupines. ¡Gachupín Bipolar!
Saluditos
¡Awww acabo de ver que aún existo en ti!
ResponderEliminar¡Ole con ole!