Andaba yo ensimismado en mi
yo mismo, y me dije pa mis adentros y mi interior más interno, que llevo diez
días sin publicar na de na, porque mi cerebro está más seco de ideas que el
desierto del Sahara en Agosto.
Pensé (cosa rara en mí), escribir sobre el circo patético en
que se ha convertido la política española en los últimos meses, en como los
directores de pista de ese circo se enzarzan en un batiburrillo
de intereses personales y
de partido, convirtiéndose en una trup de payasos siniestros (con perdón de los
payasos), mientras las buenas gentes a las que dicen representar siguen
sufriendo en sus carnes morenas: paro, hambre, desahucios,
abandono y represión.
Tal vez el Bakunin ese no anduviese tan desencaminado
cuando pensaba, que no se está tan mal sin gobierno, y que lo mejor que podíamos
hacer es mandarlos a todos al carajo.
Luego me dije… ¡córcholis! por qué no escribir
sobre los dinosaurios, que contra la creencia más extendida no se han
extinguido, entre nosotros tenemos algunos de sus más viejos y caducos representantes,
todos ellos parecen estar compitiendo por el premio al tonto más tonto (ya lo
dijo Forrest Gump, "tonto es el que dice tonterías")
Los tenemos para todos los gustos. Tenemos al
dinoculto, que pese a presumir de su amplia cultura no para de decir
barbaridades y gilipolleces llenas de veneno, con él mandando, su hermanito ya
nos dejó claro lo que significa la palabra corrupción.
Luego está el dinogranestadista,
este se caracteriza por considerarse a sí mismo el gran timonel que nos condujo
a todos nosotros, pobres pardillos ignorantes por la senda de la libertad y la
democracia, nos introdujo en la modernidad y no está dispuesto a tolerar, que
unos pobres y miserables jovenzuelos tarambanas pongan en duda su gestión al frente del país, aunque dicha
gestión se encuentre digamos enturbiada por el más triste y repugnante suceso
que se pueda dar en una democracia, una trama de terrorismo de estado.
También contamos con el dinosueldazosindarnipalo,
este está dispuesto a servir de correveidile de la derechona más reaccionaria con tal de que
le paguen su secretaria, su coche oficial, su chofer, y su suculento sueldazo
por no hacer ná, o lo que es lo mismo por aconsejar consultivamente to lo que
haga falta y mucho más si es necesario.
Por último, aunque hay muchos más, está el dinofacha, este
se caracteriza por además de ser un auténtico adefesio,
militar en un partido que se dice de izquierdas pero actuar como un auténtico
facha, ya hace unos cuantos años recién estrenada la democracia, cuando el
dinogranestadista le puso al frente de los guardianes del orden, mostró su
auténtica ideología planteando que eso de la inviolabilidad del domicilio no
era más que
una pamplina, y
que lo que había que hacer es tirar puertas a patadas y entrar a saco en las
casas de populacho, sus últimas declaraciones en el órgano de expresión de la
derecha (Telemadrid), no dejan lugar a dudas, siendo más propias de un miembro
de la extrema derecha que de un militante socialista.
Cómo escribir de dinosaurios
tampoco me apetecía, pensé ponerme filosófico y metafísico, escribir sobre el
paso del tiempo, sobre cómo ha evolucionado nuestra sociedad y cambiado nuestras
vidas, y me di cuenta que en algunas cosas no hemos evolucionado tanto más bien
hemos involucionado y retrocedido, pensemos por ejemplo en la libertad de
expresión, retrocedamos al año 1978, un grupo de titiriteros y cómicos llamado
Els Joglars, armados con las terribles armas de sus disfraces, la ironía y la farsa comete el terrible y criminal
delito de representar la obra teatral "La Torna", y por ello son condenados
a pasar varios años en la cárcel. Hoy nada menos que treinta y ocho años después,
en esta España mía esta España nuestra que cantaba Cecilia, parece que la historia se repite y nuevamente
un grupo de cómicos y titiriteros son detenidos y encarcelados por el espantoso
delito de armados de su teatrillo, títeres
y marionetas , representar una obra en la que se mata a un marido maltratador,
se apalea a un policía corrupto, se asesina a una monja secuestradora de recién
nacidos, se ahorca a un juez prevaricador, y sobre todo el más terrible de todos, se muestra el nombre de una organización terrorista, por lo tanto se les acusa
de incitar al odio, subvertir el orden establecido y hacer apología del terrorismo.
Y digo yo, y me preguntó, algo más
tiene que haber detrás de todo esto, que algo huele a podrido en Espa… perdón
quise decir Dinamarca, porque si se tuviera que meter en prisión a todo actor,
director, productor etc. que hubiese intervenido o financiado, una obra teatral,
película, o espectáculo, en el que se represente, el asesinato de un marido, el
apaleamiento de un policía, la muerte de un juez, monja, o cualquier otro ser humano,
y se cite de palabra o escrito a cualquier organización terrorista y criminal,
no quedaría cómico, actor, o titiritero en libertad y parafraseando a Berlanga
"Todos a la cárcel"
Y como de la libertad de
expresión tampoco me apetece escribir y estoy en plan melifluo me voy de
cuchipanda, a ver si me olvido de tanto desatino.
si, ya veo que andas un tanto alicaido y sin saber sobre que escribir, te voy a dar ideas que a mi me sirven cuando nada tengo que contar y es por ejemplo poner a hablar sobre el sexo de los ángeles, o bien sobre que fue primero el huevo o la gallina, te aseguro que el debate interno está asegurado, lo que no tengo claro si eso te puede o no llevar a la cárcel.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me apunto a la cuchipanda, el resto ojalá fuese silencio.
ResponderEliminarQué asco de realidad, querido