El gobierno del PP está preparando en la próxima reforma de la Ley de Montes, priorizar la actividad de matar bichos (caza), por encima de cualquier otra actividad lúdica, senderismo, ciclo-turismo, recolección de setas, etc.
Es decir cuando en un monte público se programe una batida de exterminio, o una montería carnicería, para que unos cuantos ricos satisfagan sus ansias de sangre y de muerte por puro divertimento, quedará prohibida cualquier otra actividad, os recuerdo que estamos hablando de un monte público, es decir de todos, que con la nueva ley se pretende privatizar, en el fondo lo que esta ley pretende es eliminar cualquier responsabilidad por parte del matarife (cazador), y de las compañías aseguradoras, en caso de que en su afán de matar, le descerrajen un tiro a cualquier paseante, diciendo...ah se siente!! no haber pasado!! está prohibido.
Nuevamente el gobierno del PP proyecta una ley claramente inconstitucional, el ministro Miguel Arias Cañete, responsable del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, tiene la obligación de garantizar la libre circulación, uso y disfrute de los montes públicos a todos los ciudadanos, y si hay que restringir algunas actividades, que sean aquellas que producen riesgo y peligro al resto de ciudadanos, un senderista, un ciclista o un setero, no usan escopeta, y sólo matan el aburrimiento.
La caza hoy en día, es una auténtica aberración sin sentido, que solo sirve para que una clase privilegiada, reyes, políticos, empresarios, banqueros, etc., calmen sus ansias asesinas de sangre y de muerte, porque hoy en nuestros campos y montes cazar es una actividad cara, muy cara, donde el equivalente actual al señor feudal de antaño es el único que se lo puede permitir, y como muestra ahí van algunos precios de lo que cuesta participar en estas orgias de sangre, que son actualmente las distintas formas de cacería en el estado español.
Un día de caza menor, sin ninguna garantía de que veas ni un conejo, ni una liebre, puede costar entre 200 y 250 €, eso si incluye un desayuno, a base de migas y huevos, y la comida, generalmente un cocido.
Si el matarife (cazador), quiere alguna garantía en su día de sangre, la cosa sube un pelín, el precio puede oscilar entre 2.000 y 3.000 € por jornada, y la matanza está casi asegurada, de ahí en adelante la oferta de precios sigue subiendo, a 4.000, 5.000 y 6.000 € dependiendo de la calidad y tamaño de la victima a matar, y de los alimentos del banquete posterior.
En la cima de esta desvergüenza que es la caza hoy, se puede llegar a pagar 9.000 ó 10.000 € por un puesto, que garantiza al que paga que va a satisfacer sus instintos criminales con varias muertes, lo dicho una orgía de sangre, que solo unos pocos insensibles e inmorales se pueden permitir.
Siempre que hablo o escribo sobre este tema, pienso en la frase con la que termina la maravillosa película de Jean Jacques Annaud "El Oso", hay un placer mayor que matar, dejar vivir (James Oliver Carwood).
¡¡NO A LA NUEVA LEY DE MONTES!!
Cada que aprueban una ley en tu país me da miedo que se enteren en el mío.
ResponderEliminarMaLquE, andaros con ojo los mexicanitos lindos, que un día de estos os mandamos a nuestro presidente Rajoy con todos sus ministros y entonces si que os vais a enterar de lo que es bueno.
EliminarQue no, no os asustéis que no somos tan canallas como para haceros esa chingada, (putada decimos nosotros).
Besos, chamaquita.
A mi, me da mucha pena, que se cace aunque sea un simple conejo o liebre.
ResponderEliminarBss
Mar, sobre todo cuando es por el placer de matar por matar.
EliminarBesos.
pareciera que los despropósitos de este gobierno no tienen fin.. en principio no tengo nada contra la caza controlada, se practica en cada pueblo desde el principio de los tiempos, ya no tanto para procurarse alimento como para controlar la población local de animales como los conejos o los jabalíes, que si proliferan demasiado perjudican los cultivos. Pero vamos, nada que ver con los vergonzosos negocios que mencionas, ni con las cacerías de elefantes que se montan algunos..
ResponderEliminarbesos,
Solo un ejemplo, ayer mismo vi un reportaje en la televisión sobre la finca el Alamín (Toledo), propiedad de ese ladrón presidiario y delincuente llamado Gerardo Díaz Ferrán, antiguo presidente de le patronal.
EliminarEsa repugnante rata miserable al comprender que todo su imperio basado en el robo, la explotación y la corrupción se desmoronaba, organizo cacerías-masacre de cientos sino miles de ciervos ,corzos y jabalíes, extinguiéndose en la practica toda la caza en la finca, con el único propósito de conseguir la mayor cantidad de dinero en metálico y ocultarlo a sus acreedores, a eso en mi pueblo se le llama ser "un hijo de puta".
Besos, maslama.
Muy buen post, me lo llevo a tuiter. Besos.
ResponderEliminarPues... me parece muy bien, twitteame todo lo que quieras.
EliminarBesos.